Como ya sabemos, el mundo laboral se ha visto convulsionado en los últimos meses. Los movimientos iniciados por los empleados no han tardado en debilitar las relaciones laborales y desestabilizar a los empresarios. Tanto si se refieren a abandonos masivos como a cambios en la forma de trabajar, el Big Quit y el Quiet Quitting han surgido como fenómenos poderosos a escala mundial. Su impacto es considerable, ya que han invertido el equilibrio de poder en los lugares de trabajo al tocar una fibra sensible: el compromiso de los empleados.
Este artículo propone una forma de medir el compromiso de los empleados para poder introducir unos cambios en la organización laboral de acuerdo con los nuevos valores reivindicados. Pero antes, pongamos en perspectiva esta noción de compromiso y sus retos actuales para las empresas.
¿Qué es el compromiso en el trabajo?
El compromiso es un sentimiento de adhesión que une a una persona con su empresa y le hace dar lo mejor de sí mismo para alcanzar sus objetivos. Esta definición aporta dos elementos importantes. Por un lado, existe una energía que impulsa a la persona y la propulsa en el desempeño de sus funciones. Por otra parte, la implicación, tan buscada por los empresarios, ya que favorece el inicio de una relación de confianza con el empleado, quien, al sentirse concernido por sus actos, lleva a cabo sus misiones con un sentimiento de responsabilidad.
Retos para las empresas
La ola de abandonos masivos generada por el fenómeno Big Quit y el alejamiento emocional propio del Quiet Quitting son las principales causas de esta desvinculación de los empleados, a la que los empresarios asisten casi impotentes desde hace varios meses. Por tanto, los retos para las empresas se centran en este compromiso. El objetivo para los empresarios es encontrar un nuevo equilibrio redefiniendo el lugar de cada persona en torno a la noción de compromiso.
¿Cómo puede medirse el compromiso de los empleados?
Algunas herramientas psicométricas han sido diseñadas para evaluar las aspiraciones y los valores de un individuo. Este es el caso del Perfil Pro 2 de Central Test, que se centra en siete dimensiones clave que afectan a la motivación de una persona en el trabajo.
Entre estas dimensiones, el compromiso de los trabajadores se mide a través del continuo "implicación en el trabajo" frente a "búsqueda del equilibrio personal". Esta dimensión se refiere a la gran importancia que los empleados conceden al trabajo y al vínculo emocional que les une a su empresa. Esta dimensión se ve amenazada actualmente por el ascenso de los fenómenos Big Quit y Quiet Quitting. De hecho, los empleados tienden a cortar el vínculo que han establecido con su empresa para acercarse a su vida personal y encontrar otra forma de realizarse.
Como aún estamos inmersos en estos fenómenos que siguen desestabilizando el mundo laboral, todavía es demasiado pronto para ofrecer nuevas estadísticas. Dicho esto, las empresas pueden seguir adelante y tomar el pulso a sus empleados sobre su grado de compromiso. En concreto, se invita a los empleados a completar la evaluación de forma voluntaria. A continuación, los resultados se agregan para ofrecer una imagen global del compromiso de todos los miembros de la empresa. En función de los resultados, las empresas pueden tener que revisar sus métodos operativos si observan una fuerte tendencia de los empleados a buscar el equilibrio.
Conclusión
La desvinculación profesional es una de las principales causas de los fenómenos que afectan actualmente al mundo laboral. Al tener una visión más clara del alcance de este cambio para la empresa, ésta estará en mejores condiciones de poner en marcha medidas que tengan en cuenta este nuevo valor, y que respondan a esta búsqueda de equilibrio, para conciliar mejor el trabajo con la vida privada.
Cabe suponer que al dar a los empleados una nueva libertad, al permitirles tomarse tiempo para sí mismos, desconectar e invertir en otras funciones vitales, a cambio estarán en mejores condiciones de comprometerse con la empresa.